Completamente incomprensible

Este es un prefacio del último libro de la Biblia, Apocalipsis, no entiendo por qué se llama Apocalipsis, porque en el primer versículo Juan llama al libro la Revelación de Jesucristo que Dios le dio a Jesús y Jesús por medio de un ángel lo pasó a John en la isla de Patmos. Y aún más incomprensible es que las traducciones noruegas llaman al libro la revelación de Juan, algo que no he encontrado en ningún otro país, pero no las he leído todas. Juan no tenía ninguna revelación, era un “secretario” cristiano nacido de nuevo y obediente, lleno del Espíritu Santo, quien escribió lo que vio cuando estaba en el espíritu, en el mundo de Jesús. Luego, Juan envió el libro a las siete congregaciones de Asia Menor. A este prefacio le siguen mis comentarios sobre el Libro del Apocalipsis.

Ser detenido al mismo tiempo

Estamos entrando en una nueva era marcada por el juicio de la ira de Dios. Después del gran diluvio cuando la población mundial comenzó de nuevo, Dios dijo que el hombre es malo desde el principio. No hay gente buena, todos nacen malvados. Todas las declaraciones políticas tienen una agenda oculta viciosa. Las personas que son “buenas” son gobernadas por Dios a través del Espíritu de Jesús, el Espíritu Santo. La Biblia dice que aquellos que creen en Jesús en sus corazones y están llenos del Espíritu Santo y la Palabra de Dios serán movidos hacia arriba y al cielo de repente y de una vez.

El Holocausto no fue nada

El Espíritu Santo también sigue y deja esta tierra y se permite que el mal del diablo fluya libremente. El que impidió que el infierno se apoderara de la tierra ahora se ha ido y se permite que se desarrollen atrocidades indescriptibles. El Holocausto fue malo, donde 6 millones de judíos perdieron la vida, tantos como toda la población de Noruega. Fue absolutamente terrible e imposible asumirlo por aquellos que no experimentaron la guerra, incluido yo mismo. Pero del último libro de la Biblia, Apocalipsis, puedo decir que el Holocausto no fue nada comparado con lo que vendrá en la era de la ira de Dios.

Golpea a todas las personas

Durante la Segunda Guerra Mundial, fueron los horrores de la humanidad los que prevalecieron, pero lo que viene ahora es la ira de Dios, Dios se ha cansado de la injusticia y la persecución de su pueblo santo. La ira de Dios no se puede comparar con la ira de los hombres. Solo hay una salvación de la ira y ese es el nombre de Jesús, el único nombre que puede salvar a las personas y colocar su morada en el cielo con Dios. El rapto de los salvos tiene lugar antes de que comiencen los terribles acontecimientos, la persecución del diablo de todas las personas y los juicios de la ira de Dios. Recibir la salvación de Jesús es la única manera de evitar este infierno cruel que golpeará en todas direcciones y golpeará a todas las personas que están entonces en la tierra.